Rabobank acaba de dar a conocer su informe de previsiones sobre la evolución del comercio mundial de carne de cerdo para el tercer trimestre de este año 2019. De acuerdo con sus estimaciones, las crecientes presiones de las enfermedades están desafiando al mercado global. Específicamente, la peste porcina africana (PPA) continúa amenazando el mercado mundial de la carne de cerdo, no solo provocando una caída de la producción en los países asiáticos, sino también agregando incertidumbre al comercio y las perspectivas de producción en otras partes del mundo. Si bien los precios de la carne de cerdo de China han comenzado a subir, las respuestas de la producción en el resto del mundo parecen ser cautelosas.
Otros factores, incluyendo el manejo de enfermedades y el clima, están dificultando la producción en Europa y Brasil. La reanudación de las negociaciones comerciales chino-estadounidenses es un hecho positivo, lo que implica una oportunidad para que China revise los aranceles sobre las importaciones de carne de cerdo de Estados Unidos.
La PPA continúa propagándose en China, con nuevos casos principalmente en el sur del país. Los precios de los cerdos vivos finalmente están subiendo, lo que indica una oferta limitada. Mientras que los precios de la carne fresca se están moviendo, las grandes cantidades de carne congelada almacenada por el gobierno chino continúan presionando los precios y pesan sobre los rendimientos del mercado.
En el caso de Estados Unidos, las previsiones apuntan a que durante el segundo semestre del año la producción cárnica se incremente debido a un mayor censo de ganado y a una mejora en la productividad. Si bien las exportaciones de carne de cerdo de EE.UU. están siendo menores, la resolución de los términos comerciales con México y Canadá debería impulsar las exportaciones, y la reanudación de las negociaciones comerciales con China es positiva. La escasez de mano de obra sigue siendo una restricción clave en esta segunda mitad del año.
Respecto a Europa, los brotes de PPA en los países de Europa del Este siguen siendo preocupantes y desalientan a un crecimiento del sector en esos países. El calor del verano está desacelerando la cría ganadera, contribuyendo a mejorar los precios del mercado. Las exportaciones han aumentado desde la mayoría de los estados miembros, principalmente debido a una mayor demanda de China.
Por último, en cuanto a Brasil, las exportaciones de carne de cerdo están aumentando, impulsadas por la demanda china y rusa, aunque los productores de cerdos siguen siendo escépticos acerca de si esto representa un retorno estructural al crecimiento. Los precios internos de la carne de cerdo están aumentando, ya que las exportaciones están superando el crecimiento de la producción. Si el consumo interno repunta en la segunda mitad de 2019, esto proporcionará un mayor respaldo para los precios.
Fuente: Eurocarne
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